lunes, 14 de diciembre de 2009

Suicidio... ¿valor o cobardia?

Recientemente fui a una reunión, donde una chava comentaba acerca de que si no morías al intentar suicidarte era solo un intento de llamar la atención, pero si lo lograbas era porque ya lo tenias bien planeado, mientras daba su punto de vista podía observar, gestos prejuiciosos, donde salía a relucir su falta de entendimiento por el tema, es por eso que acepto su afirmación, mas no la considero una verdad.

No es una salida fácil, puede ser estúpida y sin sentido para muchos pero mientras la vives, es lo único que ves.., y como tus sentimientos esta en el clímax de pasión, te envuelve la idea, como si te sedujera. En un principio es fácil declinar la idea, pero en cuanto comienza a latir tu corazón, más y más rápido lo difícil es NO echarte para atrás.

Hay veces que el sentimiento de dolor es tan fuerte que una corriente agridulce de aire entra por tu cuerpo y la presión sube y baja, sudas frio sin sudar, una angustia paraliza tu garganta, no puedes pasar saliva, y tus lagrimas quieren salir de tus ojos, mas no puedes decirle a nadie, no tienes fuerzas y aunque quisieras no eres capaz de hacerlo. En este momento es cuando tu juicio te hace una mala jugada y tu instinto decide por ti. Haces algo que quieres marque la vida de alguien más, una vida que no tienes ya, porque la tuya simplemente se ha desvanecido…

Una vida que me parece sumamente interesante es la de la feminista mexicana, Antonieta Rivas Mercado, quien a los 30 años, se suicida con la pistola de José Vasconcelos, dentro de la Catedral de Notre Dame, ¿Es este un hecho planeado, o simplemente se dejo llevar por un impulso del momento? Un hecho planeado podría ser el suicidio del pintor Wolfgang Paalen, "Todo lo tenía previsto: en una carta sellada dijo donde se hallaría su cadáver y quienes debían disponer de él; y dejó el dinero exacto para cubrir trámites, funerales y la cuenta (incluyendo propinas) del hotel donde se hospedaba". Este último se podría considerar un acto exitoso y premeditado. Pero quien es quien, para juzgar si es malo o bueno. ¿No es verdad que cuando estás viendo una película y te cansas, cambias de canal, o te sales del cine?, ¿No es cierto que hay ocasiones en las que estás jugando un juego de video y no tienes el interés de terminarlo, simplemente lo apagas?, ¿O un libro que no ha sido lo que esperas lo dejas de leer? Es lo mismo estás viviendo y simplemente te cansas y quieres cambiar de canal, esperando en que tendrás un nuevo comienzo, o un final definitivo. La única diferencia es que todo lo puedes retomar pero una vez muerto nunca podrás retomar tu vida, sea aburrida o agotadora.

Creo que muchos factores externos influyen en cada una de las decisiones que tomamos, pero al final termina siendo propia. Sean buenas o malas, siempre tendrán una consecuencia. La cuestión es cómo nos enfrentamos a los resultados, no puedo decidir si es bueno o malo el suicidio, sin embargo evitar vivirlo no es una buena decisión. No digo que vayas a morir por vivirlo, y al decir vivirlo aludo al sentimiento de profunda tristeza que suele caracterizar este hecho. Cada clímax de tristeza o alegría la debes de vivir al máximo, es por eso que cuando estoy triste, de verdad estoy triste y no trato de pasarlo por alto o hacer menos el momento. La tristeza que ha saturado mis emociones me han llevado a los momentos de reflexión y sensibilidad más profundos, donde mi pensamiento ha llegado a entender tantas situaciones que el mundo a mi alrededor juzga con la frialdad que caracteriza a la gente dormida.

Anna D
21092009

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